Hola de nuevo desde Punta Cana.

A las 3 de la madrugada nos recogian del hotel.
Llegamos a menos cinco al hall y nadie sabia nada de nosotros.
Salimos a la calle y sorpresa!!!!!!!

Habia una limusina para llevarnos al aeropuerto. Una limusina no como las de españa, sino la tipica americana de 9 metros, que caben dentro ciento y la madre, con su champan y todo, las lucecitas, el aire acondicionado. Vamos una pasada.
No nos lo creiamos. Por cierto era blanca. Tenemos fotos que lo demuestran.

La que liamos en el aeropuerto cuando nos dicen que por exceso de equipaje, teniamos que pasar peso de la maleta grande a las pequeñas o pagar 50 dolares. Por supuesto abrimos la maletas y intentamos llenar las siguientes sin que reventaran. Conseguimos bajar de 18 a 7 libras de sobrepeso y la chica nos dejo pasar sin pagar.

El pase por seguridad tambien fue un show. Por supuesto todo el mundo sin zapatos y la bolsa de mano de carles fue revisada y me confiscaron el body milk carisimo de orquideas que me habia comprado en New York. Pero conseguimos salir de estados unidos solo con esa baja.

A MCarmen se le acabo la suerte y tuvo que viajar en turista como todo el mundo. Fue un poco duro. Unas 4 horas de vuelo y llegamos a miami. Alli nos hacen bajar del avion y despues de hora y media volvemos a embarcar en el mismo avion y de ahi a punta cana.

Cuando llegamos a punta cana para poder entrar en el pais te piden 10 dolares ( y lo mas fuerte es que para poder salir nos van a pedir 20 por cabeza). Aqui en punta cana hay una humedad del 85 al 90 y eso es mucha calor para la gente normal. Un calor pegajoso. MCarmen esta a sus anchas.

Aqui ya sabeis lo que hay. Playas larguisimas de arena blanca, palmeras y una pulserita, que en nuestro caso por se "premium" es metalizada de colores y que te permite ir por todo el complejo y beber y comer lo que te apetezca.

Aunque la gente nos habia avisado de que la comida de los complejos es muy mala, nosotros estamos comiendo de maravilla. Mariscadas, carnes a la plancha, brochetas de pescados a la plancha, todo sin salsa ni condimentos.

Ya os contaremos mas cosas de aqui. Aunque aqui la vida tiene otro ritmo. Va muy lenta.

Saludos a todos y hasta mañana.